Yo viendo como el tipo que arreglaba el toldo del patio de
mi casa ni se inmutaba con los millones de chispas que
chocaban contra su ropa todo el tiempo:
- Perdón... ¿No se quema con las chispas que saca la amoladora?
- ¡Pero claro! ¡Si la semana pasada ya me prendí fuego!
* Diez minutos más tarde perdió un mechón de pelo. Pero ojo,
con la soldadora, no es lo mismo.